Organizaciones humanitarias de Nicaragua criticaron este jueves al presidente Daniel Ortega por no presentar un plan de acción para contener la propagación del nuevo coronavirus al reaparecer ante la opinión pública luego de más de un mes de ausencia.
"No hubo ninguna presentación de estrategia ni referencia concreta para contrarrestar el contagio y la mortandad que podría ocasionar el virus en el país", se quejó en un comunicado el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
Ortega "se mostró ilógico, irresponsable" y sin interés en promover medidas de prevención del coronavirus, reaccionó la organización.
El mandatario, de 74 años, se dirigió a la nación la noche del miércoles en cadena nacional para hablar de la pandemia que azota al mundo, pero sin embargo, no justificó su ausencia ante el público por 34 días.
Por el contrario, Ortega justificó la inacción de su gobierno ante la COVID-19, al mantener las fronteras abiertas y convocar a actividades masivas.
"En medio de esta pandemia no se ha dejado de trabajar(…) porque si se deja de trabajar el país se muere", sostuvo Ortega al referirse a la ausencia de medidas de cuarentena adoptadas por otros países frente al coronavirus, que, según datos oficiales, ha contagiado a nueve personas en Nicaragua -incluyendo un fallecido-.
A juicio del CENIDH, el gobierno de Ortega "continuará haciendo llamados a aglomeraciones, negando casos (de COVID-19), asegurando que en Nicaragua todo está controlado y mintiendo sobre las pocas capacidades con las que cuenta el país".
En el mismo sentido, Amnistía Internacional (AI) señaló en un pronunciamiento que Ortega "está ignorando flagrantemente" las recomendaciones de organismos internacionales de derechos humanos, "poniendo en riesgo la salud y la vida de miles de personas".
"Esto se suma a la grave crisis de derechos humanos que ha asolado el país durante dos años, lo que ha provocado la muerte de al menos 328 personas y heridas de unas 2.000 más, y ha forzado a más de 100.000 personas a huir del país", expuso AI, en referencia a la crisis que vive Nicaragua desde las protestas antigubernamentales de abril de 2018.
AI expresó su preocupación por unas 70 personas que permanecen encarceladas por participar en esas protestas opositoras.
El gobierno excarceló a 1.700 reos la semana pasada, pero excluyó de esa medida a los detenidos por participar en las protestas, según abogados y familiares.